Como parte de nuestro proyecto de convertirnos en un Hotel y Club destinado a promover el turismo regenerativo, desde hace un año comenzamos con la colocación de arrecifes artificiales en Playa Blanca. Estos se han llenado de una gran diversidad biológica, regenerando la vida del Humedal Marino y ayudando a la biodiversidad de la zona.

 

Sin embargo, muchas personas no tienen acceso a este proyecto, el cual, especialmente en verano, es posible observar con snorkeling, o bien, prácticamente todo el año por medio del buceo. De ahí que decidimos colocar un “reefball” en la recepción del Hotel, el cual se convirtió además en una obra de arte gracias a los artistas que lo pintaron, Niki Sáenz y Sebastian Brenes, quienes residen en Orotina.

 

Este arrecife está pintado con la vida marina que hemos podido observar en el proyecto, tal y como pulpos, pez loro, tortugas, peces mariposa, entre otras especies.

En la actualidad hay 30 arrecifes tipo campana sumergidos en Playa Blanca, y la idea es sumergir entre 15 y 20 más cada seis meses.