Luego de un estudio realizado por biólogos marinos de la Universidad Nacional y el Instituto Nacional de Aprendizaje se determinó que el ecosistema creado a través de los arrecifes regenerativos en Playa Blanca está estabilizándose y funcionando como centro de reproducción, alimentación y protección tanto para especies de invertebrados como para peces de importancia comercial y turística.

Según los datos de la investigación, la diversidad de peces aumentó exponencialmente, tanto así que al iniciar el proyecto se reportaron 4 especies, mientras que al concluir estos dos años de estudio, se encontraron 57 especies distintas. 

A continuación, Carlos Perez Reyes, biólogo regente del proyecto, nos detalla acerca del éxito del proyecto.