Si bien existe una ley que regula el parqueo especial para vehículos ocupados por personas con discapacidad (Ley 7600), así como otros espacios reservados para esta población,  donde  se indica claramente que quienes ocupen este lugar cuando no corresponde están infringiendo la ley y se les debe imponer una multa, lo cierto es que hay muchos que se hacen “de la vista gorda”, afectándo la calidad de vida de estas personas.

¿Por qué son necesarios los sitios reservados? ¿Son una pérdida de espacio frente a la falta de lugares donde estacionarse? ¿Es injusto que se otorgue esa “ventaja”? Pues bien, la idea fundamental de estos espacios reservados es permitir que una persona que no puede desplazarse fácilmente como el resto pueda acceder a los servicios públicos y privados.

Por un momento imagínense que ustedes son los que están en silla de ruedas y pregúntense: ¿qué es más fácil: caminar tres cuadras o ir en silla de ruedas en un sitio donde los autos se suben a la acera y las rampas están rotas, obstaculizadas o no existen? En definitiva, no es una ventaja, es un medio por el cual se ponen  a la par de las personas que no sufren ninguna discapacidad. De esta manera, pueden desenvolverse y ser parte de esta sociedad de manera inclusiva.

En el Club, por ejemplo, algunos reclaman problemas con estos  estacionamientos o distintos espacios demarcados. Los encuentran ocupados por autos sin el distintivo vehicular o personas sin ninguna discapacidad .

Si yo sé que puedo estacionarme un poco más lejos y caminar, sería mejor hacerlo y dejar libre el espacio para alguien que no puede.

Es fundamental que todos tengamos más respeto y consideración, y que la administración vigile que la ley se cumpla dentro del Hotel y Club, ya que todos somos Punta Leona y debemos ser reflejo de sus valores fundamentales.