¿Cómo incorporamos los langostinos de río al cultivo de Acuaponía?
El término langostino se refiere a un grupo muy diverso de crustáceos de agua dulce con abdómenes musculosos y estrechos, antenas largas y patas delgadas. Se los puede encontrar alimentándose en el fondo de la mayoría de las costas y estuarios, así como en sistemas de agua dulce.
Suelen vivir de uno a siete años y la mayoría de las especies son omnívoras. El camarón y langostino, respectivamente, se refieren comúnmente a las especies de agua salada y dulce, aunque estos nombres se confunden a menudo, especialmente en el sentido culinario.
Los langostinos pueden ser un gran complemento para un sistema acuapónico, tal como lo tenemos en Punta Leona. Consumen la comida de los peces que estos no han comido, así como también sus desechos y cualquier material orgánico que encuentren en el agua o en el fondo. De este modo, ayudan a limpiar y mantener la salud del sistema, y aceleran la descomposición de la materia orgánica.
Los langostinos son muy territoriales, por lo que necesitan una importante asignación de espacio lateral.
En condiciones ideales, los langostinos tienen un ciclo de crecimiento de cuatro meses, lo que significa que teóricamente es posible realizar tres cosechas anuales. El ciclo larvario de los langostinos es bastante complejo, ya que requiere una cuidadosa vigilancia de la calidad del agua y una alimentación especial. Aunque es posible a pequeña escala, la cría de langostinos solo se recomienda a los expertos.
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