SÍNDROME DE LA CABAÑA: TENGO MIEDO DE SALIR Y ENFRENTARME A LA NUEVA REALIDAD

Luego de más de dos meses de cuarentena el mundo comienza a despertar poco a poco y retomar lo que ahora llamamos una “nueva normalidad”. Al salir del letargo en el que nos encontramos los psicólogos también han alertado sobre la existencia algo a lo que han denominado “síndrome de la cabaña”, el cual afecta a quienes detuvieron sus actividades diarias para encerrarse en su casa durante muchas semanas.

“Cuando hablamos del ‘síndrome de la cabaña‘, nos referimos a un estado anímico, mental y emocional que se ha estudiado en personas que, tras pasar un tiempo en reclusión forzosa, han tenido dificultades para volver a su situación previa al confinamiento”, argumentó la psicóloga Sandra Isella al diario español ABC.

Según varios psicólogos consultados por este mismo medio, son algunos los factores que pueden influir en ese temor a salir a la calle. El vivir una situación a largo plazo con el minuto a minuto genera mucha incertidumbre y una sensación que deriva en miedo con mucha facilidad.

Se pone en la lupa especialemente a aquellas perosnas que debieron afrontar la cuarentena en soledad, pues el confinamiento a nivel psicológico no es fácil y tampoco saludable. “Si además de encontrarnos aislados, la hemos pasados solos, esto puede aumentar nuestra vulnerabilidad”.

Eso sí es importante recalcar que no estamos ante ningún transtorno psicológico, sino ante una reacción de supervivencia normal. Porque el hecho de pasar tantos días aislados habitúa a nuestro cerebro a esa seguridad que encontramos detrás de cuatro paredes.

Pero ¿por qué nos daría miedo volver a la calle de nuevo? Bueno, la respuesta de los especialistas es que la sobreexposición que hemos tenido estos días a las noticias. Aunque la información puede ayudaros a entender mejor lo que ocurre, puede convertirse en un arma de doble filo.

Según la psicóloga Sheila Estévez en declaraciones dadas al sitio ABC, “nos encontramos ante un problema cuando nos quedamos en bucle dando vueltas a la información que nos llega, alimentando de esta manera nuestra ansiedad”.

Además si ha esto le añadimos que el riesgo de contagio sigue latente, nadie en sus cinco sentidos va a querer exponerse innecesariamente.

Sintomas

Aunque el Síndrome de la Cabaña no es un patología reconocida formalmente por la psicología, si se tienen identificados la manifestación de algunos síntomas clínicos como lo son la ansiedad, inquietud, sintomas depresivos y problemas de sueño.

Otro de los efectos psicológicos detectados en la gente que tiende a salir poco a poco del confinamiento es el miedo al contagio propio o de nuestros seres queridos. Además hay personas que intentan evitar situaciones en las que hay gente, lo cual les hace resistir a salir y con eso alargar el aislamiento.

Vuelta a la “nueva normalidad”

Debemos regresar gradualmente a las labores cotidianas de nuestra “anterior vida”. Los psicólogos recomiendan que sea a nuestro propio ritmo, escuchándonos y adaptándonos a las cosas que se puedan hacer a la velocidad que estemos listos para hacerlos, pues como dicen “cada uno tiene su propio tiempo”.

Asimismo, apunta que nos hará sentir que controlamos la situación seguir el protocolo marcado por las autoridades: «Llevar guantes, mascarillas, cumplir los horarios… todo esto nos ayudará a coger las riendas de la propia vida y a comenzar a vernos con nuestra gente, respetando los límites marcados, aumentando la cautela y disminuyendo la sensación de peligro».

Esto será como vivir en otro planeta, donde vamos a enfrentarnos a nuevas normas, hábitos, comportamientos y protocolos, de ahí que nuestros acercamiento a esta nueva normalidad debe ser gradual y respetuosa.